sábado, 29 de octubre de 2011

Entre cima y sima


Para mi es difícil andar por el mundo atravesando muros y dejando atrás personas y experiencias. Es casi que imposible para mi, vivir dejando todo atrás como si solo me importara una cosa. Y ese es el problema, que no me importa una cosa, sino muchas y por eso tengo que llevar una vida acelerada y a la vez laxa.

Sigo adelante y el miedo, decido, dejare que se vaya extinguiendo solo sin darle mayor importancia. El miedo a equivocarme, el miedo al bloqueo mental, el miedo al futuro, en fin, todos los miedos a la basura, que se pudran y vuelen en ceniza.

Doy cada vez más pasos y mis pasos son cada vez mas certeros, mas pesados. Sigo y sigo, y busco encontrar una manera de caer de la montaña falsa a la que me lleva el miedo y no me he atrevido a destruir.

Doy mas pasos, sigo caminando. Es como si estuviera andando en medio de mis pesadillas. Camino pesada y certeramente. Se empiezan a hundir mis pies en un fango lodoso lleno de excremento mental.
Se hunden mas y mas y de pronto, hundido estoy yo entero.

Ahora, ya no estoy en la cima de la montaña, estoy por el contrario en el suelo. Veo con mis ojos un paisaje que espera construirse, esta casi vacío. Camino, y es como si flotara, no hay muros que atravesar, ni personas que olvidar. La pintura del miedo se extinguió. Solo resta volver a empezar después de haber limpiado la mierda, volver a empezar. Construir de nuevo cimientos fuertes y resistentes, nada de indecisión. Lo que nos resta del camino será duro pero definitivo.Lo que nos falta por caminar será el resto de nuestras vidas.

jueves, 27 de octubre de 2011

Introspección

Empezó a oler a lluvia. Minutos después, las gotas empezaron a caer. Fue esa la primera vez que lo vi. El estaba ahí sentado en mitad de la calle, miraba a todos lados, pero no muy rápido, era un hombre pausado. 

Las gotas empezaron a caer cada vez mas intensamente pero el seguía allí sin moverse. Yo lo miraba desde afuera, desde una perspectiva externa. Los carros pasaban por su lado pitando, pasaban a toda velocidad frenéticos como la ciudad.
El parecía tranquilo, se sentía bien consigo mismo.

Verlo me hacia sentir identificado, me hacia sentir como si el y yo fuéramos el mismo. La lluvia caía  ahora mucho más intensamente, estaba granizando. El seguía estático.

Yo no me estaba mojando porque me cubría el vidrio de la poesía , yo no me estaba mojando, yo estaba cubriendo al suelo de la lluvia. Mientras tanto, el siguió sin moverse, el siguió sentado en flor de loto mirando a todas partes, parecía no importarle nada. Era como si se hubiera quedado en otro plano, como si estuviera viviendo sobre un espejo, sobre el agua. 

El tenue gris del suelo ahora se iba pintando de un color húmedo y brillante, estaba lloviendo hacia treinta minutos. Lo mire desde afuera, Mejor dicho, lo seguí mirando. Ahora, la gente lo insultaba a gritos por obstaculizar la vía pero a el no le importaba. 

Empezaron a caer rayos, el los ignoro. Yo en cambio salte asustado cuando cayo el primero. Para contrarrestar mi salto el hombre siguió sentado. Parecía que solo le importaba respirar, es lo que percibí con mi mirada. El resto de las cosas no eran nada, no existían. 

Los insultos lo hacían sordo, el frío del suelo lo hacia flotar, el agua de la lluvia lo secaba. Lo único que el hacía era respirar. Y lo seguí mirando, y por muchos días se quedo ahí sin cambiar de posición. Ya a los varios días, nadie hacia nada, había transfigurado en un monumento. El respiraba, yo lo sabia sin tenerlo que ver. El seguía allí ignorándolo todo mientras el mundo giraba alrededor de el. 

El paso de los días lo pinto con el teñir del carbón. El polvo, el agua y el humo de los carros lo habían vestido de urbanidad. El hombre, tranquilo, se quedaba en su posición a pesar de todo.

Ya llevaba varios días sin comer, pero parecía no necesitarlo. Parecía como si la sed y el hambre no le punzaran las sienes y el estomago. 

Lo observe durante mucho tiempo, lo observe sin darle importancia a mi ambiente, lo observe todo el tiempo y no me di cuenta que al final en el encender de un mechero me había vuelto como el. Ya no me hacia falta nada porque yo era la imagen que alguna vez mis ojos captaron. Me quedé detenido en el reloj de arena, me quede en medio de la luna y del sol, me quede suspendido, por siempre, en mitad de una calle cuyo único obstáculo soy yo.

lunes, 24 de octubre de 2011

Abre los ojos


No me augures el suicidio,
No puedo controlar esa propuesta.
Se quiebra en mi, todo,
Y sangro de mis manos indecisión.

No dejes nunca de celebrar mi muerte,
Porque cuando me vaya, no volveré,
Y entre ríos de oro y bosques de zapan.
Yo estaré bien.

Nunca te arrepientas por haberlo dicho,
Agradece al cielo, que ya salio de ti,
Escapó como navío hacia el naufragio. Escapó de ti.

No pidas perdón por  haber errado,
Las palabras hastían como la gota que derramo el vaso,
No pidas perdón por nada, porque cuando veas ya todo habrá acabado. 

domingo, 23 de octubre de 2011

Un día sin sol es una vida sin Hermanos


De la misma manera en que un día sin sol no vale
Una vida sin un amigo a quien amar tampoco.
Una promesa sin cumplir no existe,
Cuando realmente no vemos una razón para seguir.

Porque un abrazo de fraternidad es más grande
Que cualquier vicio destructor,
Porque un consejo en el “timing” adecuado
Es tan valido como una bofetada que nos obliga a reaccionar.

Y es que, no vale la pena caminar
Sin un amigo a quien abrazar.
Simplemente no vale la pena.

Y es que no vale la pena escribir,
Sin tener amigos que lean y digan en verdad,
Lo que este y otros poemas los han hecho sentir.

-Nadie nos quita lo bailado-

-Los amo-

jueves, 20 de octubre de 2011

Te Necesito

Desperté esta mañana a la misma hora de todos los días. Antes de pararme de la cama, trate de abrir mis ojos pero se cerraron por el exceso de luz que entraba por la puerta. El despertador sonaba mientras yo hacia ese ruido de los recién levantados, ese chasquido con la boca que nos define el momento y nos impide la vuelta al sueño. Baje mis pies descalzos al frío del suelo y a tientas busque mis pantuflas. Atine e inserte mis pies en ese par de pantuflas fieles que siempre me llevan a donde voy en las mañanas. Me puse de píe, mis ojos ya estaban mas abiertos que antes. Me dirigí a la cocina, sabia que mi esposa me estaba preparando desayuno. Camine hasta esa cocina de baldosas blancas y limpias a pesar de los años y salude a Gabriela, mi esposa. Se volteo hacia mi con esa sonrisa corta y sencilla que siempre me ha fascinado. Luego, respondió mi saludo diciendo: Buenos días, ya me estabas haciendo falta por aquí. Siempre me dice eso cuando tardo en levantar. Acto seguido me sirvió el desayuno, huevos fritos. Me beso antes de que empezara a comer y me dijo: Eres todo para mi, sin ti no existe lo demás.

Termine mi desayuno y agradecí a mi esposa por ese gesto de aprecio que era para mi el desayuno en la mañana. Me dirigí al baño, me bañé y luego me lave los dientes mirándome fijamente a los ojos en el espejo. Por un segundo pude ver que existía, que ocupaba un lugar en el mundo.

Di el ultimo escupitajo de crema dental y emprendí mi salida de la casa. Me despedí de mi esposa, la bese en los labios y le dije que la amaba y que volvería para almorzar. Salí a la calle y estaba convulsionada como siempre, estaba llena de gente. Empecé entonces a caminar, debía llegar a tiempo a atender el puesto de café en los Campos Elíseos. Camine hacia la estación de buses mas cercana y en el camino, sentí que de repente, todo estaba desolado, Sentí como si yo fuera el único en la acera.
Veía pasar gente, pero también veía como me ignoraban, como me evitaban. Parecía como si yo fuera invisible. Atravesé las masas siendo nadie, atravesé las masas siendo sin ser.

 Luego lo vi a el en el suelo, vi como me miró a los ojos haciéndome sentir que existía de nuevo. Luego leí su letrero, decía así: Con las monedas que sobran en sus bolsillos me ayudan a mi, a olvidar el hambre de la soledad. Le entregue un par de monedas que flotaban en mi bolsillo y vi como agacho su cabeza en agradecimiento por mi caridad.

 Seguí caminando y nadie me toco, nadie me miro, No miré a nadie. Llegue a la estación donde se detiene el bus que me lleva al trabajo. Volví a existir cuando le pague el pasaje al conductor. Al bajarme del bus le agradecí y recordé el esfuerzo de la persona que iba sentada a mi lado por no tocarme cuando fui a salir del asiento.

 Volví a existir por tercera vez en el día cuando llegue al puesto de café y salude a mi compañero. Trabaje toda la mañana, existí para todos mis clientes. Salí a la una del local y repetí el mismo proceso de llegada pero en reversa. No existí para nadie, el mendigo que me necesitó ya no estaba donde había estado.

 Camine reflexionando en medio de los árboles, me sentí infinitamente pequeño. Había muchos como yo caminando entre las hojas !que triste es que ninguno se determina con alguno¡. Luego, arribe a mi hogar. Salude a mi esposa con un beso muy largo y especial. Me dijo que me amaba y que me había extrañado. Yo la mire y le respondí: ¿Sabes amor? solo existes cuanto te necesitan.

-Existes-

domingo, 9 de octubre de 2011

Ruleta Rusa

Vivir es el mejor castigo al que me han condenado. Vivir es sentir y jugar a la misma vez, es apostar todo y no arriesgar nada. Vivir es despertarse en la mañana y no mirar la hora. Eso es vivir.

Todo es un juego, una ruleta rusa disfrazada de destino. Algún día tendremos que disparar. No se yo cuando llegara mi turno, pero sé que si me salvo en el primero de mis turnos, en el segundo la bala si saldrá disparada a mi cabeza destapando la tapa de mis sesos y volando en pedazos mi existencia.

Y por más trágico que suene lo de la ruleta rusa, debemos aceptarlo, el revolver siempre tendrá el tambor lleno. Lo mejor de todo, es que hay una bala para cada uno de nosotros.

Pero saben que. No me importa si mí destino ya esta escrito, no me importa si muero mañana, no me importa nada. Porque estoy en ese estado perfecto en el que me siento flotar por ahí sin mas.

Es que hay días así. Días tan crueles y sucios que nos despiertan de ese sueño profundo en el que nos aislamos por temporadas. Y en la mañana, cuando despertamos, nos damos cuenta que nada tiene solución. Así que, ¿Para que preocuparse?

No le veo sentido a la pregunta. Es más, lo veo todo mas poético y apreciable. Mi habitad despertó hoy con el pie derecho. Escribir en un carro a 140 kilómetros por hora escuchando Radiohead, es la mejor manera de esperar mi turno en el juego que a todos nos toca jugar.

Todo se mezcla, los árboles al lado de la carretera, las montañas, las nubes, las personas, el asfalto, el pasto, las rejas, todo. Otra vez vuelve a mi la alquimia de los colores. Pero en este caso, soy yo una de esas personas que viaja en el carro que funde su color con los demás. En este caso, soy yo un paisaje pasajero y casi imperceptible. En este caso, no importo yo ni lo demás, porque voy en la carretera persiguiendo mi destino de la mejor manera en que puedo hacerlo.

Si sigo esperando de esta manera, que vengan a mi el 2012 y el nuevo orden mundial, que vengan gobiernos a impedirme libertades, que venga el Apocalipsis, que venga mi turno en la ruleta..

Hoy no tengo miedo.

Si sigo así, no me temblaría la mano al coger el revolver o al tomarme una dosis de cianuro. Porque si lo hago, estaré feliz de haber vivido mi condena de la mejor manera que pude y con las mejores personas que pude haberla vivido.

¡Bum!

martes, 4 de octubre de 2011

Solo Cuando Estoy Solo

Cuando estoy solo,
Olvido el mundo que me rodea
Y solo existo yo en la marea,
Cuando estoy solo.

Cuando estoy solo,
Apago las luces y prendo una vela,
Pienso en el humo
Mientras bailo vals con las estrellas.

Cuando estoy solo,
No me es necesario ser,
Simplemente existo
Y me vuelvo fiel,
A mis sentidos e impulsos,
También a mi manera de ser.

Cuando estoy solo,
El espejo no me miente,
Me muestra una cara sucia
Que siempre esta ausente.

Cuando estoy solo,
Aparece lo mas profundo de mi ser,
Lo que se esconde en el alma
Y la luz nunca puede ver.

Cuando estoy solo,
Escribo poemas sobre la soledad.
Solo cuando estoy solo,
Veo mi reflejo en un agua sin etiqueta
Y mis ojos sin un antifaz.
Solo cuando estoy solo
Podrás encontrar a esta persona,
Que ahora escribe, en la oscuridad.

sábado, 1 de octubre de 2011

Se me pasan los días

Me gusta cuando el viento es pasivo y calmo.
Ese calor perfecto después del almuerzo,
Ese estado de somnolencia hipnótica.

Me gusta cuando he pasado un buen día
y no queda lugar para un pudo haber sido.
Me gustan los días en los que siembro
la nostalgia del futuro.

Me gustan las tardes de parque,
llenas de sol y de risa.
me gusta cuando veo que estas ahí,
a menos de un paso de distancia.

Me gustan las reacciones impulsivas
Que vencen el miedo y a la soledad.
Me gustan así, simples,
llenas de espontaneidad.

Y es que así me gustan las cosas,
Con reglas quebrantables y "extremas"
Como diría un amigo.

Así me gustan las cosas,
con rutinas maleables
y con canciones que componer.

Porque me gusta estar despierto
cuando los arreboles se agotan,
Porque me gusta hacer las cosas
cuando no las debo hacer.

La Alquimia de los Colores

Lo enciendo, lo dejo entrar y espero pacientemente a que coja efecto. Lo empiezo a ver todo mejor, parece como que los carros se callaran, como si las nubes se alejaran y como si mis sentidos, cuando quiero, se agudizaran. Veo como las hojas de la matera tiemblan de frío por el viento que esta soplando.

Empiezo a sentir las yemas de mis dedos. Luego mis pies. Ahora cierro mis ojos y simplemente escribo esperando que algo bueno salga de este experimento. Ya se fue el viento, ya no siento frío y veo que las hojas ahora también se quedaron quietas. Lo siento entrar de nuevo, corre por mi sangre y lo acelera todo, vuelvo a ver con claridad, estoy en la cima de la montaña.El mundo esta bajo mis pies.

Lo alcanzo a mirar todo desde arriba por un segundo y alcanzo a desear estar aquí por siempre. Luego caigo. Empiezo a caer, ruedo por bosques y por praderas al mismo tiempo, paso por el mar y me empapo los sentidos de nostalgia. Siento como la arena se mezcla con mis dedos.

Ahora esta volviendo. El viento de nuevo, las hojas se empiezan a mover, empiezo a temblar y todo se torna frenético. Parece como si en mi autopista mental los carros empezaran a andar tan rápido que no los puedo distinguir. Lo llamo la alquimia de los colores.

Ahora duermo bajo un árbol gigante, estas a mi lado, puedo sentirlo. Puedo sentirlo en la manera en que respiras, se como lo haces. Se que me estas mirando con tu mirada mas perfecta, Triste y melancólica,feliz y arriesgada. Esa mirada tuya, enamorada.

Despierto una vez mas, tu cabeza descansa contra mi pecho. Despierto, miro a mi alrededor y veo los arboles en mitad del mar, veo a los pájaros bañarse en el río y veo la arena siendo una con el pasto. Te miro y susurro las dos palabras que alguna vez pensaste nunca iba a decir. Te sigo mirando, duermes tranquila y satisfecha. siempre te ha gustado dormir en lugares como este.

Luego viene el viento otra vez, te agarro fuerte para que no te lleve lejos de mi. Esta vez las hojas se mueven mucho mas rápido, pero tu parases no tener frío, no despiertas. Y me pregunto, ¿será posible que tanta perfección sea real? ¿Estare despierto,dormido, donde estoy? Lo único que quiero es que si estoy soñando estés a mi lado cuando despierte, no quiero caer de la montaña otra vez sin saber que vas a estar aquí.

-Despierta.
- ¿Que, que pasa?
-Tenemos que irnos, el vuelo sale en tres horas.
-¿Eres tu?
-Estoy contigo, acabas de despertar. Te amo.